Virila, una de las primeras mujeres barrenderas de Asunción
Con 48 años y siendo madre soltera de 5 hermosos hijos, Virila Violeta Pérez llegó a la Municipalidad hace 20 años, con muchos sueños, ganas de servicio, optimismo y siendo consciente de los enormes desafíos que lleva ser mujer, madre y trabajadora en nuestra sociedad. Un día, el deber le puso una escoba y una ciudad sedienta de limpieza al frente, y fue así que, Virila se convirtió en una de las primeras mujeres barrenderas de Asunción.
Entre la sacrificada labor cotidiana, recuerda grandes momentos y anécdotas que marcaron huellas en su vida «En el primer día, barrimos la calle Palma, desde México hasta Alberdi, fuimos ovacionados por los transeúntes y las vendedoras de chipa, nos regalaban comida, no pude evitar las lágrimas», recuerda con la voz quebrada y la moral alta, producto de saber que el servicio y el compromiso con la comunidad, trasciende mucho más allá que solamente un trabajo. «A veces nos aplauden y otras veces nos reclaman asuntos de la Ciudad que no podemos resolver, pero que afortunadamente la gente entiende, y es el ánimo del transeúnte el que me da fuerza para continuar».
Finalmente, Virila, una de las mujeres protagonistas de Asunción tiene un mensaje para sus pares, y la sociedad: «Insto a las mujeres paraguayas como Las Residentas, llevar sobre sus hombros el destino de la Patria, todos los días, desde el trabajo más pequeño, como es barrer, hasta los altos cargos ocupados por las mujeres».