22 DE MARZO: DÍA MUNDIAL DEL AGUA 2020 CON EL LEMA “AGUA Y CAMBIO CLIMÁTICO”
La Municipalidad de Asunción conmemora, desde la Dirección General de Gestión Ambiental, el Día Mundial del Agua. Uno de los ejes emblemáticos que se trabaja es precisamente el Programa “Restaurando los territorios que producen Agua Dulce y Alimentos en la ciudad de Asunción”.
Desde 1993, el Día Mundial del Agua se celebra cada año, el 22 de marzo. Es un día establecido por las Naciones Unidas para destacar la importancia del agua dulce.
El Día Mundial del Agua 2020 se centra en el agua y el cambio climático, y en la estrecha vinculación que existe entre ambas cuestiones. La campaña pone de manifiesto que, en función del uso que hagamos del agua, podremos reducir las crecidas y sequías, luchar contra la escasez de ese bien natural y su contaminación.
Al lograr una adaptación a los efectos que el cambio climático tiene en el agua, se protegerá la salud de las personas y se salvarán vidas. Utilizando el agua de forma más eficiente, se reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero.
Para la Municipalidad de Asunción el agua es una cuestión estratégica, atendiendo la actual Crisis Climática Mundial. Desde el Departamento de Recursos Naturales y Adecuación Ambiental de la Dirección General de Gestión Ambiental de la Municipalidad de Asunción, se desarrolla el Programa “Restaurando los Territorios que producen Agua y Alimentos en la ciudad de Asunción”, basado en 3 Ejes, cuyas acciones se encuentra desarrollando esta dependencia.
Estos tres ejes son:
• Relevamiento y Monitoreo
• Eco Gestión
• Eco Educación
Para la implementación de este Programa, se desarrollaron articulaciones interinstitucionales claves que permiten un abordaje integral a la actual situación de los cauces de agua y sus áreas de influencia.
Otro aspecto fundamental es la restauración de las cuencas que conforman el territorio de Asunción, la promoción de huertos agroecológicos y bosques comestibles comunitarios, entre otras prácticas saludables.
La ciudadanía debe tomar conciencia del necesario cambio de actitudes para el cuidado cotidiano de este bien común.
Los territorios con mayor contaminación por actividades humanas producen escasez de agua o mala calidad de este vital líquido, lo que influye en la salud de los ecosistemas que, por ende, afectan la propia vida de los seres humanos.
