Calle Manuel Gondra, el dos veces Presidente del Paraguay, de quien se decía la frase: Taguapy sapy’ami he’i Gondra

La calle Gondra lleva el nombre de uno de los hombres intelectualmente más brillantes del Paraguay a quién las conspiraciones en su propio partido político le negaron la posibilidad política de influir en el más alto cargo, el de presidente de la Nación.

Por la Ordenanza N°2 de 1992, la calle Manuel Gondra sustituye el nombre de la calle Sebastián Gaboto. Se inicia en la avenida España y se desplaza al Este hasta el portón del Parque Caballero.

El nombre Manuel Gondra también se identifica con el increíble túnel del Fortín Gondra durante la Guerra del Chaco.

Manuel Gondra nació en Buenos Aires el 1 de enero de 1871 pero tuvo nacionalidad paraguaya por su madre Natividad Pereira, oriunda de Ypané, casada con el argentino Manuel Gondra Alcorta en plena Guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay.

Manuel Gondra (padre) se enamoró en Villeta de Natividad Pereira. Era hijo del comerciante don Adeodato Gondra, quien en la preguerra viajaba el Paraguay para hacer negocios, en la embarcación “Ypané” de los hermanos Pastor y Antonio Pereira y que cubría la ruta Asunción – Buenos Aires.

Al término de la feroz guerra contra el Paraguay, Natividad Pereira volvió a la casa familiar en los límites entre Villeta e Ypané.

Su hijo Manuel Gondra Pereira, realizó sus primeros estudios en Villeta y después en el Colegio Nacional de Asunción como pupilo. Terminó la secundaria en el año 1900 y pasó a la Facultad de Derecho, aunque la carrera quedó trunca debido a la Revolución de 1904, en la que participó.

Sin llegar a obtener título universitario llegó a ser considerado “supremo docto sin doctorado”.

Logros de Manuel Gondra

Fue docente, periodista, diplomático, historiador, ensayista, un gran orador y presidente de la República electo dos veces, aunque obligado a renunciar a  días de haber asumido teniendo como enemigos a caudillos de su propio partido político, el Liberal.

Según el historiador Ricardo Caballero Aquino quien escribió su biografía, “En el partido Liberal son los adversarios intrapartidarios, los enemigos más porfiados y feroces que cualquier ocasional rival de otro partido”.

En 1903 el presidente Juan Antonio Escurra le encomendó la “Resalva Paraguaya al Tratado de Petrópolis de Bolivia con Brasil, donde Bolivia le cedía parte del territorio de Bahía Negra en disputa con el Paraguay”.

En la gran disputa periodística de la post guerra del 70 entre Juan E. O Leary y Cecilio Báez dictaminó con autoridad: “Aceptemos el pasado íntegro de la patria, con sus errores, con sus glorias, con sus sufrimientos y sus martirios. Respetemos todo el pasado, respetemos hasta nuestra tiranía, ya que nuestro tirano, es el único de América que supo morir teniendo en los labios el nombre de la patria”.

En su primera presidencia del 25 de noviembre de 1910 al 17 de enero de 1911 duró 51 días al frente de la Nación.

En la segunda oportunidad fue presidente de la República desde el 15 de agosto de 1920 hasta el 7 de noviembre de 1921.

En la Conferencia Panamericana en Santiago de Chile en 1923 fue el autor de una jurisprudencia continental para evitar guerras y conflictos entre países. Fue tan importante el régimen jurídico que presentó que se recuerda esa conferencia como la Convención Gondra.

Muchas de sus propuestas, en la actualidad, son llevadas adelante por el Consejo de Seguridad de la ONU.

A Gondra se debe la tesis geopolítica de mayor vinculación con Brasil, al este, para salir de la hiperdependencia de Argentina.

Fue el primero en hacer contacto con los menonitas que finalmente migraron al Chaco.

Murió Joven, su Casa aun está en Pie

Manuel Gondra Pereira estuvo casado con Emilia Victoria Alfaro y tuvieron cuatro hijos: Graciela, Susana, Cecilia y Manuel Adolfo.

Su biblioteca, una de las más valiosas del Paraguay -luego de su fallecimiento- fue adquirida por la Universidad de Austin, Texas.

Falleció el 8 de marzo de 1927, a la edad de 56 años, en su casa de la calle Sebastián Gaboto pidiendo ser enterrado en la finca de los Pereira.

La sabiduría de los paraguayos sobre los cortos períodos en que fue presidente, inventó la frase :”Ta guapy sapy a mi he’i Gondra”.