Martin McMahon, embajador de los Estados Unidos, quien llegó al Paraguay en el estridor de las armas, es homenajeado con una calle de Asunción

Como continuación a la serie de entregas sobre la nomenclatura de las calles de Asunción y la historia que encierra cada una de esas denominaciones, se destaca una calle capitalina que lleva el nombre de Martin McMahon.

Fue diplomático, representante de los Estados Unidos de Norteamérica, quien llegó como embajador ante el presidente Mariscal Francisco Solano López, en plena batalla de Itá Ybaté, en diciembre de 1868.

Por la Ordenanza 649  de 1942, se denomina General Martin Thomas McMahon a la calle al Sur de la avenida Mariscal López, ex calle De las Aves.  Es continuación de la arteria Las Perlas.  Nace en la calle Roque González de Santa Cruz al Oeste y se dirige al Este hasta la avenida República Argentina.  Paralela a las calles  Eduardo López Moreira al Norte y al Sur a Coronel Du Graty, en el barrio Recoleta.

Su historia y la tenaz defensa que hizo de la causa paraguaya, fue descripta magistralmente en el libro que escribió el embajador de los Estados Unidos Arthur Davis, llegado al Paraguay en 1982.

El libro se titula: Martin McMahon, diplomático en el estridor de las armas.

Fuente: Twitter @dicosoffmm

El destino del embajador Davis, llegado al Paraguay 114 años después que su antecesor, Martín McMahon, quedó enlazado para siempre con nuestro país.

Su hijo había estado en Minga Guazú, a través del Cuerpo de Paz, quedando maravillado de la historia del Mariscal López y de la calidez de los paraguayos.

A su retorno, entusiasmó a sus padres, quienes iniciaron una exhaustiva investigación sobre McMahon.

El destino quiso que el 22 de julio de 1982, el presidente Ronald Reagan lo designara embajador ante el Paraguay.

A poco de llegar sumó más datos a la investigación que venía haciendo.

El embajador Davis sufrió la pérdida de Marian, su esposa, en el trágico accidente de aviación de Eastern Airlines, el 1 de enero de 1985, cuando viajaba de vacaciones a visitar a su familia.

El libro sobre el que habían trabajado juntos el embajador y su esposa, fue presentado el 4 de julio de 1985 y terminó su misión diplomática el 28 de setiembre de ese año.

El término “estridor” es el jadeo de la respiración con problemas. Nada más gráfico que la situación del Paraguay en ese año de 1869, después de Itá Ybaté y con Asunción ocupada.

McMahon nació en 1838.  Fue combatiente en la Guerra de Secesión.

Cuando quedó libre la plaza de embajador en el Paraguay en guerra, le fue ofrecido el cargo abandonado por el embajador Charles Washburn, acusado por el Mariscal López de haber conspirado contra su gobierno, por lo que salió del país.

Su reemplazante, el embajador McMahon, llegó a Angostura el 11 de diciembre de 1868, en pleno “estridor de las armas”.

Presentó sus cartas credenciales el 14 de diciembre de 1868. Conoció de cerca la verdadera situación del país, defendiéndose de un ejército superior en hombres, por ambiciones expoliadoras.

López y McMahon congeniaron.  El 23 de diciembre de 1868, mientras arreciaban los cañonazos, el Mariscal le designó albacea de su testamento, donde dejaba todos sus bienes a su compañera Elisa Lynch y le confiaba a sus hijos para que los llevara a Piribebuy.

Elisa Lynch se quedó a compartir la que se creía sería la batalla final.

McMahon y López se conocieron mejor en el campamento de Azcurra, donde se recompuso el ejército nacional.

El embajador ocupó una casa en Piribebuy y tuvo tiempo de dibujar escenas memorables de la vida y el paisaje del Paraguay en guerra.

Su presencia molestaba a los aliados, ya que deslegitimaba el gobierno impuesto en Asunción por los aliados.

El ex embajador Washburn, en tanto, seguía su propaganda contra Solano López.  Tuvo su oportunidad cuando su hermano Elihu Washburn fue nombrado secretario de Estado.  Solo estuvo en el cargo 11 días, que aprovechó para lograr que se ordenara el término de misión del embajador McMahon ante el presidente López.

Quedaron serias dudas acerca del consentimiento del presidente Ulises Grant en la firma del documento, debido a que estaba decidido a mediar para poner fin a la guerra.

McMahon denunció el saqueo brasilero a la legación, el robo de documentos y los bienes dejados por extranjeros al cuidado de la Embajada.  

Encontró la bandera estadounidense hecha jirones, en la calle Estrella y los muebles de la Embajada en la casa ocupada por el marqués de Caxias.  

La legación estaba donde actualmente se encuentra la galería Asunción Súper Centro.

Antes de su retorno, McMahon recibió, de parte de ingleses que permanecían en el país, 7.000 libras esterlinas para llevar a sus familias, más 12.500 libras esterlinas que debía depositar en una cuenta bancaria de Elisa Lynch en Londres y el encargo de encontrarse con Emiliano López Pesoa, hijo del Mariscal, y entregarle, además de una  carta, una suma de dinero.

Por esta razón, luego de depositar el dinero de los ingleses en la Embajada en Buenos Aires y recoger a sus tres hermanas, que allí le esperaban, partió a Londres donde cumplió el encargo de Solano López.

Retornó a su país el 22 de octubre de 1869.  El 4 de noviembre de ese año, ante el Congreso de los Estados Unidos, refirió lo acontecido en el Paraguay, contestó preguntas y desvirtuó la campaña propagandística de los aliados y de Charles Washburn.

Publicó artículos de prensa y dio conferencias sobre el genocidio que vivió el Paraguay.

McMahon se dedicó a la política.

Murió el 21 de abril de 1906.

Antes de despedirse había escrito, en un álbum de Elisa Lynch, el poema “Resurgirás Paraguay”.

Según el historiador Efraím Cardozo, el álbum se encuentra en poder de los descendientes del Vizconde Taunay.

Otras noticias